Cómo aumentar la autonomía de tu coche eléctrico: 9 consejos clave

¿Has considerado alguna vez dar el salto a la movilidad eléctrica, pero te preocupan las inquietudes y dudas sobre la autonomía? Tal vez te consuele saber que no estás solo, y también que hay respuesta para todas tus preguntas. La distancia que puede recorrer un coche eléctrico con una sola carga es una de las principales preocupaciones tanto para los conductores actuales como para aquellos que consideran pasarse a estos vehículos del futuro.

Aunque es cierto que los coches eléctricos han avanzado considerablemente en términos de la distancia que pueden cubrir con una carga, es fundamental comprender algunos aspectos que influyen en la autonomía real de estos vehículos. En este artículo, te compartiremos nueve consejos clave para optimizar la autonomía de tu coche eléctrico. ¿Te has interesado por un Audi e-tron, un Skoda Enyaq, un Cupra Born o un Volkswagen de Gama ID? Entonces continúa leyendo.

Conduce con suavidad:

Uno de los factores que más incide en la autonomía de un coche eléctrico es el estilo de conducción. De hecho, es algo que también ocurre en los vehículos de combustión. Las aceleraciones bruscas y las frenadas fuertes pueden disminuir drásticamente la autonomía. Los coches eléctricos están diseñados para ofrecer un rendimiento eficiente, por lo que una conducción suave y progresiva es clave para aprovechar al máximo la carga de la batería.

 

Mantén una velocidad constante:

En todos los trayectos que hagas, y siempre que sea posible, evitar cambios bruscos de velocidad. Se trata de otro truco o hábito para aumentar la autonomía. Mantener una velocidad constante, especialmente en autopistas y carreteras, disminuye la carga en el motor eléctrico y, por lo tanto, reduce el consumo de energía, haciendo que la autonomía de la batería se prolongue más.

Guarda la distancia de seguridad correcta:

Tal vez te preguntes qué tiene que ver la distancia de seguridad con otros coches en la carretera con la autonomía de un vehículo eléctrico, pero lo cierto es que juega un papel fundamental. ¿Por qué? Porque mantener una distancia adecuada con los vehículos que te rodean no solo mejora la seguridad, sino que también reduce la necesidad de frenar y acelerar constantemente. Esto, a su vez, se traduce en un menor consumo de energía y una mayor autonomía.

Aprovecha la frenada regenerativa:

La mayoría de los coches eléctricos están equipados con sistemas de frenado regenerativo, que recuperan parte de la energía utilizada para mover las ruedas cuando reducimos velocidad al presionar el pedal de freno. Aprender a utilizar este sistema de manera eficaz puede aumentar la autonomía al recuperar más energía y reducir el desgaste de los frenos convencionales. Dicho de otro modo, es otra forma más de maximizar la autonomía de tu coche eléctrico durante la marcha

Planifica tu ruta de manera inteligente:

Elegir la ruta más eficiente puede marcar la diferencia en la autonomía de tu coche eléctrico. Evita carreteras con tráfico intenso, desvíos por la ciudad, pendientes pronunciadas o curvas cerradas cuando sea posible, ya que estos factores pueden aumentar el consumo de energía.

¿Cómo puedes hacerlo? En la actualidad existen una gran cantidad de aplicaciones de mapeado como, por ejemplo, Google Maps, que es la más utilizada. Con estas apps puedes planificar la ruta, marcar el trayecto y calcular tanto la estimación del tiempo como del consumo, además de tener localizados puntos de carga durante el camino. Algo fundamental cuando queremos hacer un viaje de considerable duración.

Carga de manera estratégica:

Al hilo de lo comentado en el párrafo anterior, debemos señalar que la forma en que cargas tu coche eléctrico también influye en su autonomía a largo plazo. Evita la carga rápida constante, ya que puede acelerar el desgaste de la batería. En su lugar, opta por cargar de manera convencional y mantén la batería entre el 20% y el 80% de su capacidad para conservar su integridad y prolongar su vida útil.

Aprovecha la climatización durante la carga:

Sabemos que el aire acondicionado es un aliado incondicional en épocas de calor, y que la calefacción suma confort en estaciones como el invierno. Sin embargo, es importante que sepas que los sistemas de climatización pueden consumir mucha energía. Ajustar la temperatura del habitáculo durante la recarga puede ayudar a minimizar este efecto, ya que el coche utilizará menos energía cuando esté en movimiento.

Reduce el peso innecesario:

Vamos a hablar ahora del equipaje o la carga que vas a llevar en tu vehículo eléctrico. Cada kilogramo adicional que llevas en el coche aumenta la demanda de energía. Por lo tanto, asegúrate de llevar solo lo esencial en el maletero y evita los soportes para carga en el techo o la parte trasera, ya que crean una resistencia aerodinámica adicional que requiere más energía para mantener la velocidad.

Controla la presión de los neumáticos de forma regular:

Mantener la presión adecuada en los neumáticos es esencial para reducir el consumo de energía. Y es que los neumáticos desinflados aumentan la fricción en la carretera y, por lo tanto, reducen la autonomía. También ocurre en los coches de combustión, cuyo consumo es mayor cuando las ruedas no están correctamente hinchadas o en mal estado. Asegúrate de verificar y ajustar la presión de los neumáticos con regularidad.

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