6 consejos para ahorrar combustible y conducir de forma más eficiente

Si te preocupa conducir de forma más eficiente y respetuosa con el medio ambiente y, además, quieres ahorrar en gasolina, te recomendamos que sigas leyendo nuestro artículo de hoy. ¿Por qué? Porque vamos a darte una serie de consejos con los que logram ambos objetivos. El primero de ellos podría ser apostar por un coche híbrido o eléctrico, pero si este tipo de vehículos todavía no está a tu alcance, hay ciertos hábitos que puedes tomar para consumir menos combustible en tus trayectos.

Anota bien dada una de estas seis recomendaciones, porque serán clave para que, a corto o medio plazo, puedas notar sus efectos beneficiosos tanto en tu bolsillo como en el indicador de combustible de tu coche. Además, esto también repercutirá en una reducción de las emisiones de CO2 a la atmósfera. ¡Vamos allá!

• Neumáticos con la presión correcta

Una gran cantidad de conductores no suelen prestar demasiada atención al estado de los neumáticos de su vehículo hasta que, desgraciadamente, es demasiado tarde. Por ello, es importante mantener una presión correcta, no solo para que su salud sea óptima, sino también para contribuir a que gastemos menos combustible.

¿Por qué ocurre esto? Porque unas ruedas con baja presión suelen exigir un rendimiento mayor al resto de componentes del coche. Esto redunda en un gasto mayor de gasolina ya que será necesario más combustible para recorrer menos distancia. Por contra, unos neumáticos inflados adecuadamente mejorarán la eficiencia del vehículo, contribuyendo a que la conducción se produzca en armonía plena.

• Evita acelerar y frenar bruscamente

En el mundo actual, en el que vamos con prisas en nuestro día a día, cuesta encontrar a conductores que no conduzcan de forma brusca. Hablamos de un hábito que, además de influir en la seguridad, también tiene su cuota de importancia en el consumo excesivo de combustible. Por ello, se debe apostar por una conducción pausada y prudente, evitando siempre frenazos y acelerones bruscos.

¿Por qué ocurre esto? Porque unas ruedas con baja presión suelen exigir un rendimiento mayor al resto de componentes del coche. Esto redunda en un gasto mayor de gasolina ya que será necesario más combustible para recorrer menos distancia. Por contra, unos neumáticos inflados adecuadamente mejorarán la eficiencia del vehículo, contribuyendo a que la conducción se produzca en armonía plena.

• Evita los atascos

Pocos contextos son menos eficientes para el consumo de gasolina de un coche que los atascos. Hablamos de tramos en los que el coche está en marcha pero en los que el movimiento es lento y prolongado. Esto puede ocurrir cuando hay accidentes en carretera con sus consecuentes retenciones, o en tramos en los que se producen atascos en hora punta, como a la entrada o salida del trabajo.

Si evitamos estas situaciones contribuiremos también al ahorro de combustible y conduciremos de forma más eficiente, incluso apostando por rutas más largas, dado que tardaremos menos tiempo. Para conseguir este objetivo, podemos apoyarnos en aplicaciones como Google Maps, en la que podemos consultar incluso el estado del tráfico en nuestros trayectos habituales.

• Aligera el peso de tu vehículo

De la misma forma que en nuestras mochilas solemos llevar objetos intrascendentes para el día a día, el maletero de nuestro vehículo suele llevar también “equipaje” excesivo para nuestra rutina. Para algunos conductores, su coche es, en parte, una extensión del hogar en el que guardar ciertas cosas que, realmente, son innecesarias y solo suman al peso del vehículo sin tener en cuenta que, cuanto más carga lleve, mayor será el consumo de combustible.

Por tanto, debemos evitar cargar el coche con cosas intrascendentes. Por ejemplo, si hemos hecho la compra o hemos vuelto de viaje, es mejor invertir unos minutos en descargar todo aquello que ya no necesitemos en lugar de dejarlo en el maletero por un tiempo prolongado. Cuanto menos pesado sea el vehículo, menos gasolina necesitará para moverse.

• No abuses de la climatización

Ahora es invierno, y lo normal es, sobre todo en zonas frías, encender la calefacción del coche. Después, llegará el verano y, con él, el turno del aire acondicionado. La climatización es clave a la hora de sumar confort en conducción, pero lo cierto es que, por diversas razones, deben apostar por un uso responsable y moderado. Desde el punto de vista del ahorro del combustible, lo mejor es no conectarlo mientras estamos en marcha.

Si es posible, es conveniente encender la climatización antes de arrancar el vehículo para que no afecte tanto a la eficiencia del combustible. De esta manera, podremos aclimatar a nuestro gusto el habitáculo interior antes de iniciar la marcha y no exigir más de la cuenta a nuestro vehículo con más sistemas en funcionamiento.

• Mantenimiento siempre actualizado

Cuando hablamos del mantenimiento de un vehículo, muchos conductores tienden a pensar que no es algo excesivamente necesario, o que pueden alargar los plazos marcados por su Servicio Oficial. Sin embargo, lo cierto es que esta reflexión está muy alejada de la realidad. Es más, cumplir con el estricto mantenimiento de nuestro coche puede ayudarnos a conducir de forma más eficiente y ahorrar en combustible.

¿Por qué? Porque, de esta manera, siempre llevaremos nuestro vehículo en las mejores condiciones y no exigiremos más de la cuenta a ninguno de sus componentes en conducción. En este sentido, es de vital importancia cambiar el aceite y los filtros de aire y combustible regularmente para garantizar que el motor funcione de manera eficiente.

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